Del 12 al 15 de noviembre, en el marco de la visita de orientación técnica al Grupo de Monitores Interamericanos (GMI-CO) y al Grupo de Asesores Técnicos Interamericanos (GATI), en Bogotá, el Director General de la Junta Interamericana de Defensa, Brigadier Flávio Luiz de Oliveira Pinto, mantuvo una importante agenda de trabajo con algunas de las principales autoridades militares colombianas.

El principal objetivo de la actividad fue reforzar los tradicionales lazos de profesionalismo y amistad que unen a la JID y las Fuerzas Armadas de Colombia, particularmente en aspectos relacionados con el apoyo brindado en materia de Desminado Humanitario, pero también considerando los diversos temas desarrollado por la Junta a favor del desarrollo de capacidades y el fomento de la confianza y la seguridad hemisférica, en áreas como ciberdefensa, cooperación en casos de desastre, seguridad marítima, gestión de armas, protección ambiental, flujos migratorios y derechos humanos y derecho internacional humanitario, entre otros.

En esa ocasión también se impuso la Medalla de la Junta Interamericana de Defensa a la bandera del Comando de las Fuerzas Militares de Colombia.
Las principales autoridades visitadas fueron el Mayor General Hugo Alejandro López Barreto, Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Militares; el Mayor General de Infantería de Marina Guillermo Arturo Castellanos Ojeda, Inspector General de las Fuerzas Militares; y el Brigadier General Ricardo Heriberto Roque Salcedo, del Comando de Ingenieros del Ejército.
El trabajo de desminado humanitario de la JID en América Latina

La JID ha apoyado el desminado humanitario en América Latina desde 1993, con personal militar de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Perú, Trinidad-Tobago, Venezuela y Uruguay.
Dicho apoyo, siempre en conjunto con los programas de la OEA, se inició con la Misión de Asistencia para la Remoción de Minas en Centroamérica, que operó de 1993 a 2010 en Costa Rica, Guatemala, Honduras y Nicaragua, además de brindar asesoría técnica a Surinam. De 2002 a 2013, la Misión Sudamericana de Asistencia para la Remoción de Minas operó en Ecuador y Perú.

En Colombia, la JID opera desde 2006, con el Grupo de Monitores Interamericanos, y desde 2015, con el Grupo de Asesores Técnicos Interamericanos. El aporte de la JID es parte del esfuerzo desarrollado por diversas instituciones que trabajan por el desminado humanitario en Colombia, lideradas por la AICMA/OEA y las Fuerzas Armadas de Colombia. Los resultados alcanzados representan un fuerte incentivo para quienes se dedican a esta difícil pero esencial actividad humanitaria: entre 2006 y 2023, el número anual de víctimas causadas por las minas terrestres, entre muertos y heridos, cayó de 1224 a 95, mientras que Colombia dejó la segunda posición en el ranking de países con más minas terrestres en el mundo, pasando al noveno lugar. Durante este período, se neutralizaron más de 30.000 minas y la superficie liberada de este terrible flagelo alcanzó la marca de más de 14 millones de metros cuadrados (equivalente a 1.700 campos de fútbol). La proporción de municipios colombianos libres de minas prácticamente se duplicó, alcanzando el 83% del total.